
Bebés a remojo
Fotografiar a un bebé en un barreño lleno de agua, sin reglas, es garantía de diversión para él y para el que mira.
Primero un ligero chapoteo con las manos, después un vistazo al borde del barreño. Sacan un brazo fuera…”uyyy un poco de hierba, para dentro”. La mojan, nos la enseñan, alguno se la lleva a la boca “agg no está bueno”…vuelta al chapoteo. Hasta que dejan sin agua el barreño.
Durante todo el tiempo, yo no habré perdido detalle, para capturar con la cámara los momentos más naturales y divertidos.
¡Me encanta hacer fotos de bebés disfrutando de sus descubrimientos!

Fotos de hermanos de cachondeo
Una regadera y una fuente cerca. No hizo falta más, para que la complicidad de estas peques asomara.
Pasaron un rato muy muy divertido, a su aire. Solo se acordaban de los adultos cuando se quedaban sin agua en la regadera.
Sin interrumpir su juego y manteniendo la distancia, pude convertir una tarde de verano en fotografías de hermanos auténticas.

La sandía es para el verano
Durante esta sesión la mamá me pidió que hiciera unas cuantas fotografías a la más pequeña sola, porque acababa de cumplir un año.
Aprovechamos que le gusta mucho la fruta para llenar el barreño de una refrescante sandía. Quedó una sesión de fotos de primer cumpleaños diferente, graciosa y veraniega.
¡La peque se puso morada de sandía!



El verano es diversión al aire libre. También en Madrid
Disfruto mucho estas sesiones porque me hacen revivir mi infancia y recordar que todos los niños merecen un verano lleno de actividades al aire libre dirigidas y sin dirigir.
En la playa, la montaña o el pueblo, por supuesto, pero también en Madrid.
Sin salir de la ciudad hay parques y jardines con muchas zonas de sombra, como el parque de El Retiro, para que los niños puedan jugar al aire libre.
Niños siendo niños. Mojados y remojados. Con churretones de sandia o de helado, correteando y saltando al sol.
Contacta conmigo y llena su álbum de fotografías con las que podrán viajar a su infancia una y otra vez.